Olocun y Orichaoco

OLOCUN - Es después de Oddua, la más alta representación de Osha. Este Orisha que está representada en Osha como la vida y la muerte. OLOKUN es deidad de Osha, porque es el mar, y el mar es Oló: expansión y extensión y es de OloKun donde sale Illá-mo-allé, que es así, como se llama a la que nosotros conocemos por Yemayá, que quiere decir: MADRE DEL MUNDO. En Africa hay algunos lugares que le llaman Illá-moellá: MADRE DE LOS PECES. 
En fin, Olokún todo lo abarca. El mar es un mundo profundamente desconocido y respetado por el africano. Al mar se le llama Okún.
OLOKUN - Esta representada por los siete mares que rodean al mundo y cada uno comprende un Yemayá original, cuyos nombres son los siguientes: Okute, Azabba, Mayelogun, Asesú, Oquero, Oroó e Ibú-Agana. Estos son los siete nombres originales y verdaderos de los Yemayá de base.
Ahora bien, agotados los nombres de estos mares, cuando se está fabricando un Yemayá, el Oriaté que haya aprendido conscientemente investigará en el campo de Ará-onú, por ejemplo: Okute-odonu, Azabbalonú, etc.
La familia de Olokún está compuesta de nueve santos, que son: Siete Belli, Olokún y Shangó. Los Belli son los siguientes:
1- Ainá
2- Caindé
3- Ideú
4- Olóri
5- Itáguo
6- Oronía
7- Arabba
8- Shangó, padre de estos Belli. Tenemos que recordar que la palabra Shangó quiere decir problemas.
OLOKUN, LA CABEZA DE ESTA DEIDAD SE HALLA EN EL FONDO DEL MAR, POR ELLO SE DICE EN IROSO: NADIE SABE LO QUE HAY EN EL FONDO DEL MAR, SINO EL PROPIO MAR Y OLODDUMARE UNICAMENTE.
Ahora bien, para que usted pueda darse cuenta por qué los Belli son la bandera del Santero, lea donde dice: Shangó, No. 8 y leerá lo siguiente en Lucumí: 8, Problemas. 7, Gira la gente. 6, Tierra de mayores (también se interpreta como en la Tierra está). 5, Camino de mayores. 4, Cabeza grande. 3, Le levantará. 2, Sobre cualquier obstáculo. 1, Candela. 
OLOKUN, único poder sobre todas estas cosas.
Y si no sucedieran muchas cosas, que en sí son los problemas de la vida, en bien o mal, y trae como consecuencia a los moradores de esta Tierra un estado de confusionismo, que no se sabe dónde se va a parar, si continuará hacia adelante, si llegará a la meta de su vida, si será grande o no será nada. En fin, cuando se piensa en todas estas cosas viene la enfermedad o la tragedia, ya sea por familia o por cosas de la vida, y todas estas cosas nos llevan a pensar en Dios y, por ende, buscando un alivio para nuestra alma y todas estas cosas, repito, que el destino crea en nuestra vida. Nos da un átomo de Fe y de esta manera elevamos nuestros pensamientos y corazón al Dios Todopoderoso e incluyendo a su Corte Celestial: los Orishas. 
Y todas estas cosas, ¿de dónde nacen? De Olokún, de Shangó, de Aganá Ocún, que quiere decir: Nadie sabe lo que encierra en su profundidad. Entonces usted comprenderá, que este Orisha siendo tan poderoso, tiene que llevar dos manos de caracoles que nunca hablarán. Se trata de un cuerpo sin cabeza sobre la Tierra, porque su cabeza se esconde en las profundidades del mar, sólo Dios sabe dónde está.
Olokún habla por medio de Yemayá, ni siquiera habla una sola vez, a no ser por medio de la referida Yemayá. En Olokún está la vida de todos nosotros y allí está nuestra muerte también, representada por dos grandes espíritus: SOMUGGAGGA y ACARO.
En Somuggaggá está representada la vida y en Acaró la muerte.
Estos dos espíritus, cuando se les hace fiesta a Olokún, todos los que quieren pueden verlos representados en la Tierra por medio de alguien que se prepara debidamente antes, con tiempo suficiente para que no le suceda nada a esa persona, y ha de presentarse a la fiesta con unos vestuarios y caretas imponentes, que lo caracterizan como Ará-onú, así como Olokún, Elegguá, Oggún, Oshosi, etc.
Olokún tiene tambores distintos a los demás Orishas, propios para ella, por ejemplo: Olokún tiene acto en que tiene cinco tambores; otro acto, en que se utilizan tres tambores y, en otro, se utiliza uno solo. Este se utiliza para obra secreta que aun muy connotados Babaloshas, Iyaloshas o Babalawos, no los ven, ni verán nunca, si no son escogidos para ello propiamente y debidamente preparados para actuar en esa obra. Este tambor es distinto a los demás, porque los otros son de madera y éste es una tinaja con su secreto, para hablar con Olokún, para rezarle, para invocar el Espíritu. 
Dicha tinaja se utiliza también en invocación espiritual de ODDUA. En casos necesarios.
Acaró es el personaje que se utiliza para bailar Eggún: despedir muerto.
SOMUGGAGGA, SOMU: Teta, mama; GGAGGA: Grandísima. ACARO, ACA: sobre o poner; RO: derivado de Oróo, Acción.
ORICHAOCO, ESTOS DOS PERSONAJES: UNO REPRESENTA EL DIA Y EL OTRO LA NOCHE, ES EL MISMO ORISHAOKO, "ICU AFEFE AROGODDO GAI OLOTI-GUARO"
ORISHAOKO
Orishaoko poderoso Orisha que representa la Tierra. Este Santo es masculino, es el esposo de Olokún. Tiene dos características: una, de día y otra de noche; de día es un hombre perfecto, bonito, de modales finos, en cambio de noche, es la personificación de la muerte porque él se disfraza: Icú afefe oroggoddo.
A la entraña de la Tierra se le llama Oroiña, Oróo: accionar, mover, girar; Iña: movimiento continuo o de rotación. Este Orisha acciona espiritualmente, es por lo que los africanos, utilizan como símbolo una teja con una penca de yagua marcada u otras cosas análogas de las que se utilizan en el techo de una casa cualquiera; pero con siete rayas, ya sean horizontales o verticales. Estas rayas representan un Odu, que es, 7 Oddí, en diloggún significa: Cielo, Agua y Tierra. Ese es el signo que se le pone a la teja o artefacto que se utiliza para esto.
Sus Allé del secreto, son unos caracoles en forma de tirabuzón, que tienen unas rayas verticales en distintos colores. Su diloggún y su otá.
Oroiña, se dice que es la madre de Aggallú, pues bien sabe usted, si ha leído "EL LUCUMI AL ALCANCE DE TODOS", que el símbolo de Aggallú es el volcán y, es por lo que se dice, que Oroiña es la madre de Aggallú. Y recuerde que Aggallú no solo sale de la entraña de la Tierra, sino que para bien de nosotros es un astro en el Cielo, el Sol, y por eso se denomina Aggallú-Solá.
Agallú quiere decir, todo lo que se ve; y Solá, lo que sale. Y se entiende por tanto, que Orishaoko y Aggallú, tienen una gran relación entre sí, si se tiene en cuenta que ese volcán que sale de sus entrañas, de la entraña de la Tierra, que eso es nuestro Orishaoko.
En Orishaoko se tira el diloggún una sola vez y lleva una sola mano de caracoles. Orishaoko sí tiene cabeza, este Santo es una Deidad. No lleva dos manos de caracoles, pero fíjense que arriba se le indica que Orishaoko lleva ocho caracoles de un tamaño que fluctúan entre dos y dos y media pulgadas, en forma de tirabuzón, con unas rayas verticales de distintos colores, hecho esto por la naturaleza y para los religiosos representan los distintos colores de la flora terrenal. 
Asimismo, son también colores que se distinguen a Orishaoko, cuando está disfrazado. Estas mismas pintas son los Otifis de pintura que se les hacen al pan, al coco u otras cosas que se utilizan para los Ebbó donde habla Orishaoko y Orishaoko habla por boca de Yemayá, por cualquiera de las siete, ya que si nos fijamos un poco son sus hijas, porque Orishaoko es el esposo de Olokún, madre de todas las Yemayá.
La comida de Orishaoko nunca debe dársele de comer en la casa, ni darla para que nadie la coma. A Orishaoko se le tiene siempre que usted le vaya a dar de comer, prepare una carga de todo lo que produzca la Tierra y esté a su alcance, y ésta tiene que ser cruda. Así como los animales que usted le sacrifique, también debe enviárselos crudos en una canastica, para depositarlos en un hoyo en el monte.
Esto debe ser todo blanco. De todas las viandas que se le ofrenden, deben de presentarle un pedacito ante la imagen de Orishaoko o al secreto; todo lo restante, repito, debe enviársele para el monte y depositarlo en un hoyo que encontrare. 
Y así, hará con lo que quede cocinado, a los tres o siete días, o lo que con el coco indique Orishaoko.
Los secretos de este Orisha son tan profundos, que son muy pocos los criollos que pueden conocerlos. Este Orisha tan respetado y considerado por los propios africanos, es un fiel cumplidor de su palabra. Hay un pacto entre Orishaoko y Oloddumare, que él cumple fielmente, porque de él se nutren y viven todos los seres conscientes y aquellos que no son conscientes y que existen sobre la faz de la Tierra.
Pues bien, a continuación daremos una explicación al lector, de la similitud de este Santo con Olokún. Okún: el mar, es un mundo y en su interior se encierra Olokún, dos grandes potencias espirituales como lo son Somuggaggá y Acaró. 
En Orishaoko, la Tierra, tenemos a OQUE y a OGGUE, que son también dos grandes potencias en la Tierra para su impulso e influjo.

Olorun

En algunas partes del continente africano, los naturales no conocen, ni adoran otro Dios, que el sol y, como el se llama lorun, y este esta intimamente ligado a Oloddumare, es por lo cual lleva el calificativo de Olorun.

¿Quien es Olofi?

Si hemos dicho que Oloddumare es la creación, la perfección de todo lo humano; entonces nos tenemos que fijar que Olofi, este vocablo que comienza con la silaba olo, que significa: extensión, expansión; y concluye con la silaba fi, que quiere decir: pintica, manchita dentro de la gran extensión o espacio de este mundo.
Es por eso que Olofi viene a resultar ser el primer responsable ante Oloddumare de todas las cabezas y cosas que existen en este mundo y con potestad sobre los otros santos de deidad ya conocidos, de nuestra religión, como Son: Oddua, Olocun, Orichaoco y Lleguá. Olofi es la cabeza directa de todas las cosas que están en relación directa con Oloddumare, sobre la faz de la tierra.
Y es por eso que todos los santos tienen que contar con la aprobación de Olofi, para la realización de todas las cosas y actos de la vida. Olofi es un Obbatala, pero no es un Obbatala que tal o mas cual persona puede tener, aun cuando se trate de su imagen o símbolo consagrado en nuestra religión.
Lógicamente, la imagen o los secretos consagrados a Olofi, lo pueden tener un omocolabba. A esa persona es necesario enseñarle todos los secretos y prepararle debidamente en Ocha y, después pasar por el mismo proceso en Orunmila y entonces, seria cuando dicha persona vendría a ser un verdadero omocolabba.
Ahora bien, puede tener Olofi aquel oluwo que dentro de todos los babalawos sea el, el mayor en Orunmila. Entonces en manos de este, estará Olofi y llevara el calificativo de Obba, en el seno de los oluwos y para nosotros los olochas; los oni-Changó son los mas llamados a ejercer las funciones de omocolabba.
A Olofi no le puede suplir ningún santo en sus funciones ante Oloddumare, en este mundo. Tampoco lo puede tener ninguna mujer.
Por lo regular todos los que no entienden bien el dialecto lucumí, lo mismo le da llamar a Oloddumare, Olofi, que Olorun. Para estos, todos tienen el mismo significado, no siendo así; ahora vamos a explicar, quien es Olorun. En algunas partes del continente africano, los naturales no conocen, ni adoran otro Dios, que el Sol y, como él se llama LORUN, y éste está íntimamente ligado a Oloddumare, es por lo cual lleva el calificativo de OLORUN.

Lleguá

Se dice de esta santa que es señorita. Esta virgen africana es la que representa la vida. Alle, mundo; guá, esta. Ayewá, vida.

Se dice que Olofi tenía un jardín muy frondoso y vivía muy orgulloso de su referido jardín, y un día en una reunión donde estaban conversando muchos awos, entre ellos Changó, hablaban de las virtudes de las mujeres, y a todas, le atribuían maculas.

Entonces Echu dijo: por la única mujer que responde Olofi, es por Lleguá; afirmación que dejo atónito a Changó, quien al día siguiente fue al jardín y observo que todas las flores le sonreían menos Lleguá, y a esa fue a la que Changó lisonjeó. La que no pudiendo resistirlo levanto la vista y miro a Changó, cosa que le estaba prohibido mirar a ningún hombre. Changó se fue sonriente y satisfecho. Echu que lo espiaba, cuando Changó salio del jardín de Olofi, le pregunto que había sucedido y Changó se lo contó y, mas demoro en contárselo, que el ir a poner en conocimiento de Olofi lo ocurrido entre Changó y Lleguá.

Olofi, indignado, vino a su jardín y allí se paro delante de Lleguá; esta no pudo levantar la vista para mirar los ojos de Olofi, como ella acostumbraba, Olofi se dio cuenta de lo que pasaba y como ella se presumiera que Olofi se había dado cuenta de lo sucedido, repito, antes de que Olofi hablara, abochornada dijo: papa he cometido una falta muy grave y no quiero que me perdone, sino que me mande para un lugar donde todos los que moren sean para reposar eternamente; y que será el lugar mas tranquilo para mi. Allí seré reina. Olofi dijo: Lleguá, la única flor que en mi jardín no se marchitaba, eras tú, y yo, te he encontrado muy triste; ese es un gran bochorno para mí. Entonces, desde hoy en adelante, Ile ocu será tu reinado. To ban Echu.

Oloddumare, Boromu, Oddu aremu y Osabelli.

Oloddumare.
Oloddu-mare dios todopoderoso. Esta composición de vocablos que le da el significado a nuestro supremo religioso Origen de nuestra fe, esta compuesto en el dialecto yoruba, de la siguiente manera: olo (extensión, expansión, eterno); ddu (tiempo o años); mare (nacer, crecer, criar) Y re (estabilidad, del bien, de guiar). Esto es Dios.

Oddu-aremu y Osa-belli.
Oddu-aremu y Osa-belli son Oddua. Este santo representa el tiempo y cuando se le da el calificativo de Oddu-aremu, Aremu, quiere decir cansado, y Oddu-aremu, años cansados.

Osa-belli.
Osa es salir, inquietud; be es cortar, lli es luchar, acción, mover, vivir. Osa-belli, el compañero de Oddu-aremu, es donde nace el trabajo, la lucha, todo lo que en este mundo se haga y se mueva, nazca o crezca, viva o se muera, eso es Osa-belli, el oro de esta vida.

Boromu.
Este santo es la producción, es lo que rinde, es la reproducción de la simiente en la tierra. Se dice que es la esposa de Osa-belli.

Introducción a la religión lucumí

Los cuatro hombres existentes en nuestros senos, que estamos en el deber de observar y de esta manera llegar a la verdad de los sagrados ceremoniales religiosos. Estos son los siguientes:

  • El hombre que no sabe y no sabe que no sabe, es un imbecil, huyele.
  • El hombre que no sabe y sabe que no sabe, es un ignorante, instruyelo.
  • El hombre que sabe y no sabe que sabe, esta dormido, despiertalo.
  • El hombre que sabe y sabe que sabe, pero no hace alarde de que sabe, es el verdadero sabio, siguelo.

Y cuando encontremos a este hombre, el verdadero sabio, llegaremos a la verdad aprendiendo el porque de las cosas. En todas las religiones esta Dios si le hicieramos esa pregunta a cada uno de los feligreses de las distintas religiones existentes en el universo, encontrariamos que todos, con suficientes argumentos a favor de su religion, tienen razones; porque para Dios, todos son buenos y con cualesquiera se puede llegar al cielo. Si no fuera asi, adonde irian a parar los pobres africanos a quienes no ha llegado la civilizacion aun hoy en dia?

Dejaria Oloddumare desamparado a estos seres humanos? No, Dios es justo y no permite que ninguno de sus hijos este desamparado. Es por lo que los africanos, en cada tribu, tienen una religion a su manera y forma, y en todas ellas, hay bondad y caridad para el projimo. Con estas virtudes sera suficiente para ganar la gloria.

Luego, con una u otra religion, o sin ninguna de las tantas conocidas por nosotros, tambien se puede conseguir ganar el cielo. Que poco hace cada cual dentro de su religion para ir a el!

Sabemos que en algunas religiones, hay mas celo que en otras para cumplir sus preceptos; pero siempre es poco lo que se hace ya que de religion se trata. Hay muchos seres en el mundo, que profesan esta o aquella religion, pero se pasan la vida bajo la obsesion del lucro personal sin importarles que en el mayor de los casos obtienen algun beneficio a costa de la necesidad de sus semejantes. El queda satisfecho, y se dispone a dar gracias a Dios; pero tanto Dios, como los santos, no conceden mas que lo que es justo y de razon. Y, digo esto, porque los hay engañadores que dicen que son santeros, y

los hay espiritisteros (como decia Obbadimelli) que dicen que son espiritistas.

Santeros o espiritistas, con grandes templos, que dicen que piden para sus semejantes, sin fijarse si lo que piden es humano o no; si logran lo que han pedido, diran: que bueno es Dios! Y si han hecho la peticion a un santo, diran: que milagroso es tal santo! Cuando estos seres ambiciosos tienen un momento de lucidez, en que les habla la conciencia, en lugar de arrepentirse lo unico que se les ocurre es pedir perdon y, otros confiesan, para salvar su pecado. Igual que el que espera los ultimos momentos de su vida, para arrepentirse de lo malo que cometio, sin darse cuenta que ya ha sido perdonado incluso por sus victimas.

Mas, una vez despojado de su caracteristica hipocresia, que empleo en este mundo, se vera a si mismo, se reconocera y no necesitara tribunal que lo juzgue; el mismo sera su propio juez. Y

esos queridos hermanos -iworos-, lo mismo existen aqui que en Africa, por lo que os digo, que Dios esta en todas las religiones porque alli, como aqui, los hay que van a parar en manos del diablo y, tambien alla, como aqui, los hay que ganan la gloria llegando al "reino de Dios" y, Oloddumare les abre la puerta porque han observado dignamente sus preceptos, con amor al projimo como cualquier religion que profeses, has hecho lo suficiente para acercarte a Dios.

Traducción de algunos vocablos del lucumí.

  • Ile oku. Casas de los muertos, el cementerio.
  • To iban echu. Confirmar lo acabado de decir.
  • Omo Kolabba. Un sabio, un juez de la religión previamente preparado en todo lo que a esta concierne
  • Oluwo. Personaje consagrado en ocha primero, y en Orunmila despues.
  • Olosha. Consagrado en Osha.
  • Oni. Prefijo que denota posesion.
  • Aina. Candela o llama de esta.
  • Caindde. Sobre cualquiera.
  • Olori. Cabeza grande de accion, de bullicios.
  • Itawo. Camino de mayores.
  • Oronia. Gira la gente.
  • Melli. Doble.
  • Aggana okun. Lo profundo de la vida que se desconoce.
  • Akaro u Okoro. Uno de los espiritus que se manifiesta en Aggana okun; representa la muerte.
  • Somuggagga. Otro de los espiritus que tambien se manifiesta en Aggana okun, pero esta nos da la vida, porque nos cria.
  • Ara onu. El otro mundo.
  • Iyalocha. Madre de santo.
  • Babalocha. Padre de santo.
  • Babalawo. Consagrado en Orunmila.
  • Iku. Muerte.
  • Oro. Accionar, mover, girar.
  • Oddun. La letra por la cual se sabe el signo o designio de la persona.
  • Aye. Caracoles.
  • Diloggun. Caracoles de registro.
  • Ebbo. Hacer lo que se hace.
  • Ota. Piedra.
  • Ewes. Hierbas.
  • Omiero. El jugo de la planta ligado con agua y otros condimentos.
  • Iworo. Santero.
  • Iyawo. Recien consagrado.
  • Ittu. Refrescar lo caliente.
  • Alosi. El diablo.
  • Umbo. Venir.
  • Leri. Cabeza.
  • Onia. Gente.
  • Arabba. Ceiba.
  • Osogbo. Es cuando un oddun o letra, no viene hablando bien.
  • Ire. Es cuando el oddun o letra viene hablando bien.
  • Ano. Enfermedad.
  • Eyo. Tragedia, problema, dificultades, en fin, todo lo malo, hasta la muerte.
  • Ofo. Perdida de cosa o persona, cualquier cosa que se presente de pronto con fatales consecuencias.
  • Akobba. Cualquier cosa mala que sin esperarlo usted, se presente en cualquier momento.
  • Fitivo. Cualquier noticia inesperada.
  • Tilla tilla. Discusiones a menudo.
  • Ona. Cuero que se recibe, o sea, distintos trastornos en la vida.
  • Acheggun ota lleye. Vencedor, enemigo invencible.
  • Ita. Es un camino.
  • Feicita. Secretaria o secretario.
  • Oddi. Sol, agua y tierra.
  • Olu. Jefe de persona o cosa.

Prólogo

El hacer el prologo de un libro, no es cosa fácil, es decir, es en si un trabajo acucioso, producto del examen de todas las ideas y conceptos plasmados por el autor en el cuerpo del mismo, a fin de esbozar a los lectores, la finalidad que ha perseguido su generador para darlo a conocer a la opinión publica y también el prologuista tiene a su cargo, el formular su concepto personal sobre la obra, haciendo resaltar su finalidad educativa e instructiva, así como, su valor literario, sin perder de vista el señalamiento de los pequeños errores de que pudiera adolecer la obra encomendada.

Así pues, he de limitarme no solo al contenido de la obra, sino a los beneficios que pudiera reportar en el futuro, a los lectores que poseen un escaso conocimiento de la mitología africana, que ha sido objeto de una despiadada critica, sobre todo, por aquellos comentaristas y escritores especializados en el campo de la sociología que recelosos y hambrientos de conocer la mística o mitología africana, se han alimentado de las versiones o comentarios hechos por personas que se jactan de conocer los verdaderos misterios de la ciencia afro-cubana, y estos a su vez, plasman estas ideas en sus libros, en la creencia de que han tenido la suerte de revelar a la opinión publica los secretos de la religión lucumí, cuando lo cierto es que esa fuente de adquisición es enteramente falsa y carente de veracidad. Decimos esto, por la razón de que los comentaristas modernos no conocen, ni pueden conocer a fondo los secretos de la mitología africana, ya que los esclavos africanos que trajeron a Cuba, las diversas mitologías feudalistas africanas, jamás revelaron sus secretos, que según comentarios de las ultimas reservas sucesorias que aun quedan como reliquias de la raza lucumí, aseguran, que sus antecesores se ocultaban de sus hijos al verificar sus ritos religiosos.

No dudo que existan algunos intrusistas y fariseos que hayan pretendido descubrir por la vía persuasiva la evolución y desarrollo de esos ritos religiosos, pero, si aseguro, que aun así no han podido conocer el fondo básico y esencial de las ceremonias lucumíes. Tampoco dudo que hayan podido descubrir algunos puntos reales de las referidas ceremonias, pero, podemos asegurar, que no pueden dar una explicación básica del fundamento de una ceremonia, es decir, cual es su razón de ser y su finalidad.

Los comentaristas y escritores modernos, persiguen en su intento no solamente un fin especulativo, sino, realzar su reputación literaria importándole muy poco, el perjuicio que pudiera redundar a los que por su santidad o credo, se encuentran afanados en perpetuar su secreto y sus misterios a través de la historia del mundo, tales como así lo hacen los masones y otras entidades religiosas. La revelación del culto de una religión, es una profanación y una traición a los sagrados principios religiosos.

Un verdadero masón tiene un juramento que impone la voluntad de dejarse cortar el cuello antes de revelar los misterios de la masonería, pues, así eran los antepasados Lucumíes; morían y se llevaban consigo el secreto de sus conocimientos religiosos. De igual modo lo verificaban los indios, pues, jamás he tenido ante mi vista un ejemplar u obra, que haya revelado los secretos de esta raza casi extinguida.

Por otra parte, los escritores que como el suscribiente, conocen muy a fondo los misterios de la religión lucumí, no son capaces de revelar públicamente la esencia mitológica de dicha religión, que a mi juicio es la más humana y la más adaptable a la religión cristiana en su finalidad.

Pues los conceptos erróneos adquiridos del populacho o de los libros editados por escritores oportunistas, le han causado un grave perjuicio en la opinión publica, que huyen de ella estimándola como una religión repugnante y propia de gente de baja cultura social. Ahora yo pregunto: ¿Que conocimientos podrán tener los escritores modernos, si estos no son "santeros, ni practican esta religión?, y que ideas podrán sugerir a la opinión publica, si la fuente de conocimientos de que se han valido estos escritores, son los comentarios de personas que tampoco son santeras, ni practican esta religión? Tal como aparece en la obra recientemente publicada titulada "El monte", que en primer termino dicha obra es la compilación de ceremonias de la religión ganga, lucumí, conga y arara, mixtificando el lenguaje africano, como si fuera un lenguaje "único", cuando lo cierto es que África fue cuna de una civilización "feudal", donde existieron tribus de tipo feudal, y donde cada tribu tenia un lenguaje típico propio, diferente al lenguaje de las demás tribus.

Al producirse en el siglo XVI el comercio negrero, conocido en los anales de la historia, por la "trata" emigraron a cuba esclavos africanos de distintas regiones de este vasto continente, que en forma de rehenes eran trasladados a la América, como una mercancía sujeta al engranaje de la compraventa mercantil.

Como es posible, que si esos esclavos tenían un lenguaje propio regional, una costumbre propia y una religión que estaba acorde con la deidad religiosa que adoraban, como es posible, repito, que ahora se pretenda mistificar los vocablos, fusionándolos en un lenguaje único? ¡No saben esos comentaristas, que cada tribu adoraba una deidad o patrón religioso! Por ejemplo, en la tierra de "tacua" se adoraba a Santa Bárbara, conocida allí y aquí, por Shangó, el rey del rayo y el trueno; y que en la tierra de la religión Arará se adoraba a San Lázaro, conocido en la religión lucumí, por Babalu ayé o el rey de la salud y de la enfermedad. Yo he visto un tratado o libro donde el autor confunde el lenguaje lucumí con el lenguaje arara y el bricaño, que también es de origen africano,

Observándose en dicha obra que existe un verdadero desconocimiento de las diferencias lingüísticas de los esclavos africanos, que en honor a la verdad, muchos esclavos no se entendían. Lo mismo ocurría en la América con los indios, que según Nicolás Estevanez, notable historiador, decía que existía entre los indios más de doscientos dialectos. En definitiva, la obra titulada "El Monte" es una joya literaria, pero en lo que respecta a la revelación de los secretos de la religión lucumí, están mistificadas, tanto las ceremonias, como el lenguaje aplicado. En cuanto a la obra del amigo Nicolás Angarica, titulada "Manual del Orihate", es una obra magnifica, con mas copiosos detalles que su obra anterior, ya que en la misma, tuvo el cuidado de salvar los errores de escritura contenidos en su obra titulada "el lucumí al alcance de todos", pues ha llegado a sus manos un diccionario y una Biblia traducida en lenguaje yoruba, a fin de que los lectores puedan conocer su legitima y verdadera escritura y su correcta pronunciación.

Por otra parte, el autor da a conocer en una forma extractada la historia de los santos o deidades de origen lucumí, que hoy en día se practica y adora en cuba. También expone los deberes que tienen los iworos o santeros con sus ahijados y estos para con aquellos. La obra es una ampliación de la anterior, ya que también ha extendido los oddun, a fin de que los Orihate, puedan extender sus conversaciones o registros. Por otra parte, revela la relación que existe entre los astros y los seres vivientes. El autor, por otra parte, da una extensa explicación de la historia de los oddun, en forma de moraleja, a fin de que puedan verificar su razonamiento del camino que tiene que seguir de acuerdo con el oddun que irradia al consultante. Así pues, más que un manual, es para el Orihate, un foco luminoso de orientación, de conocimientos y de sabiduría.

La lengua lucumí es única y exclusiva, que procede de una civilización muy poderosa del África donde radican los yorubas y no puede mistificarse ni confundirse con otras lenguas africanas. Sepan los lectores y escritores modernos, que en la región de los yorubas ha adquirido el grado de lengua nacional, pues en esta tierra, se hablan dos lenguas esenciales, o sea, la yoruba y la Oyó, con sus reglas gramaticales definidas, siendo estas, el producto de la fusión de todos los dialectos lucumíes. Oyó y yoruba, que desconocen los comentaristas modernos y que están insertados en este valioso manual, del que me digno ser su prologuista y su ilimitado propagandista.

Dr. José Roque de la Nuez (efun yomi).

La Habana, 3 de agosto de 1955